Gestión de Energía con Ética
A pesar de estar sometidos a normas y regulaciones que muchas veces nos ponen las cosas difíciles:
- Bloqueo a las renovables
- Intrusismo profesional
- Competencia desleal por parte de grandes empresas
- Incremento del coste para acceder a la energía
- Inestabilidad reglamentaria que bloquea inversiones a medio y largo plazo
- Precariedad laboral como medida de crecimiento económico de las mepresas
Es una obviedad que existe un problema de sostenibilidad y que uno de los caminos ineludibles para reducir emisiones y mejorar la competitividad de las empresas es una buena gestión del recurso de la energía.
Tenemos la responsabilidad de estar a la altura, porque los empresarios van a necesitar nuestros servicios.
Abogo por la divulgación de conocimiento y casos de éxito, la generación de foros de debate sobre tecnologías innovadoras (en contra de las famosas cajas negras milagrosas).
Y especialmente apuesto por los servicios con independencia, transparencia y honestidad, porque para la mayoría de profesionales, la implementación de nuevas tecnologías (que desconocen) supone casi un salto de fé, si no hay un trabajo de estudio y justificación técnico-económica bien hecho.
Para un Gestor Energético decente es lo normal realizar cálculos justificativos y obtener costes muy aproximados a la realidad para proyectos de mejora energética.
Pero es demasiado habitual encontrar “profesionales” que meten palabrejas como “Armónicos y perturbaciones de red” o utilizan su conocimiento para falsear resultados de “retornos de inversión imposibles”
Tenemos miedo a colaborar con otros profesionales. A veces nos convertimos en una especie de “Genios de Aladino Consultores”, y nos encargamos de gestionar todas las necesidades técnicas de nuestros clientes, lo que provoca el rechazo de pedir ayuda, ya que corremos el riesgo de que “nos robe a nuestro cliente”.
En mi opinión, debemos especializarnos, definir bien nuestros puntos fuertes y establecer conexiones con otros profesionales especialistas:
En mi proyecto empresarial así nos ha funcionado muy bien, dado que hemos establecido excelencia profesional. Tratar de acapararlo todo nos hubiera llevado al fracaso, y lo pudimos comprobar en nuestra piel con algunos proyectos iniciales.
Debe estar conectado para enviar un comentario.